Este es parte de un artículo extenso publicado por Carmen Almansa, solo un poquito para reflexionar sobre como nos educaron y como educamos en relación a las emociones y la comida.....
Saludos
auramist.
Heather una esencia para la complusividad y la necesidad de afecto y atención. |
A partir del momento en que un padre da a su hijo una galleta o un caramelo para
consolarlo y que se tranquilice, la comida se transforma en algo emotivo y no sólo
físico. Desde la infancia, la comida se utiliza para celebrar algo, calmarse, aliviar el
aburrimiento o la depresión y consolarse en momentos de tristeza o angustia. Aceptar
un trozo de tarta de cumpleaños porque rechazarlo sería antisocial, premiarse con un
poco de chocolate al concluir una ardua tarea, o beber sin ganas una cerveza o una
copa de vino cuando hacemos vida social son prácticas de la vida cotidiana.
No es frecuente que de niños se nos ayude a identificar las emociones. Es habitual en
nuestra sociedad experimentar dificultad para identificar lo que está sintiendo y
expresarlo. En un mundo de tanto conocimiento y cultura, la mayor parte de nosotros
somos grandes “analfabetos emocionales”.
comportamiento alimentario tienen una gran confusión sobre sus estados
emocionales internos
recurren a la comida o la rechazan como forma de compensar sus emociones
probablemente hayan aprendido desde niños a minimizar, negar o no mostrar
ante otras personas lo que están sintiendo.
Tan simple como eso!!! luo
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